jueves, 13 de noviembre de 2025

JEHOVÁ TE GUARDARÁ DE TODO MAL Salmo 121


 Salmo 121:7-8 Jehová te guardará de todo mal: Él guardará tu alma. Jehová guardará tu salida y tu entrada desde ahora y para siempre.

El Salmo 121 es atribuido al rey David. Se cree que lo escribió en un momento de gran dificultad, posiblemente en el desierto de Parán o cuando huía de su hijo Absalón. Es conocido también como un "Cántico Gradual", que se recitaba y se recita hoy, en tiempos de necesidad y desamparo.

Este salmo para mí es especial; recuerdo que cuando me venía a Panamá, mi hermano me regaló un cuadro en madera con este salmo, así que, cada vez que voy a viajar, lo recito, y creo que Jehová guardará de todo mal, mis salidas y mis entradas de mi casa, de mi país y a donde vaya.

El salmo nos habla de la protección de Dios. David escribió este salmo para recordarse a sí mismo, a su pueblo y a sus soldados, que Dios siempre está presente para protegernos. En tiempos de crisis, de tristeza y desafíos en la vida, debemos tener esperanza y seguridad en Dios. Jehová es nuestro guardador. Este salmo trae consuelo y fortaleza para muchas personas en momentos difíciles. 2 tesalonicenses 3:3 “Pero fiel es el Señor. Él os afirmará y os protegerá del maligno”. No se trata de solo proclamarlo, se trata de creer que esta, es una verdad espiritual bíblica y una promesa para los hijos de nuestro Dios Todopoderoso.

El salmista enfatiza el amparo y defensa constante y firme de Dios sobre su pueblo. Jehová, el nombre de Dios, quien nos recuerda su Soberanía y poder y quien nos promete reiteradamente que, él nos guardará de todo el mal que quiera asecharnos, incluso cuando entramos y salimos de nuestros refugios, recordándonos que él es un Padre y un guardián que protege a sus hijos del mal y del maligno.

Y pues, sabemos que sus promesas son verdaderas y su protección no se limita a solo un aspecto o a un momento específico de la vida, sino que abarca todo lo que somos, para todos aquellos que decidimos vivir en él. Dios guarda el alma, el cuerpo, lo material, nuestros hogares, matrimonios, hijos, trabajos, proyectos, finanzas. Nuestra salud y vida en general. "Él guardará tu alma", lo que implica que, él nos da una protección completa, tanto física como espiritual y material, abarcando aún a nuestro linaje.

“Él nos guardará” Incluye hasta la eternidad. No debemos temer. Esto es como un seguro que Dios nos deja, en todos los aspectos y en toda circunstancia llegará la ayuda, "desde ahora y para siempre", lo que nos hace recordar la omnipresencia y omnipotencia de Dios. “Jehová es tu guardador, Jehová es tu sombra a tu mano derecha”, él es el único Dios que da una presencia constante y un cuidado ininterrumpido a todos los que se refugian en su plan de salvación, que es por medio de Cristo Jesús. Guardará tu alma, te guardará del maligno y guardará tu salida y tu entrada. Amén.

Hebreos 13:8 Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos.


Toca el enlace y sigue leyendo: A sus Ángeles mandará que te guarden


Yubisai Suniaga Rada

Suscríbete y Comenta.


jueves, 6 de noviembre de 2025

A SUS ÁNGELES MANDARÁ QUE TE GUARDEN Salmo 91

 


Salmo 91:11 "Porque a sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden en todos tus caminos”. 12 En las manos te llevarán, para que tu pie no tropiece en piedra”.

La palabra ángel proviene del griego, y significa “mensajero”. Estos son emisarios de Dios entre el cielo y la tierra. 

Hay diferentes tipos y rangos. Se nombran en las escrituras, serafines, querubines, tronos, dominios y poderes. También hay arcángeles y estos tienen un rango más elevado y son enviados de Dios para hacer misiones de máxima importancia. Eso lo podemos ver en el libro de Apocalipsis.

Tenemos la historia de Jacob “Ángeles bajaban y ángeles subían”, dándonos a entender que, llevaban peticiones y traían respuestas. Los ángeles que llegan a Sodoma a casa de Lot. Los ángeles que visitaron a Abraham. El ángel de Jehová que se le aparece a Gedeón. Elías, Daniel. El ángel que anuncia el nacimiento de Sansón.

Recordemos al ángel Gabriel, Mensajero, quien vino a Maria para decirle que de ella nacería el Mesías y Salvador del mundo. Así como a Elizabet, quien tuvo un hijo y le pusieron por nombre Juan. A José para que no abandonara a María, a los pastores a quien ángeles le anunciaron el nacimiento del salvador. A Jesús después de la tentación. Mateo 4:11 “El diablo entonces le dejó y he aquí vinieron ángeles y le servían.” A cornelio, Pedro, a Pablo y muchos más. No hay dudas de que los ángeles son mensajeros y protectores de parte de Dios para su pueblo. Tanto el Antiguo, como el Nuevo Testamento, nos dejan grandes evidencias. Hebreos 1:14: dice: "¿No son todos ellos espíritus ministradores, enviados para servicio a favor de los que han de heredar la salvación?"

Pero, este tema de los ángeles es muy controversial en la iglesia, lo que debemos tener claro es que los ángeles no se adoran, sino que están al servicio y al cuidado de los hijos de Dios. Apocalipsis 22:8-9 Juan dijo: “… Cuando las oí y las vi, me postré para adorar a los pies del ángel que me las mostró. Pero él dijo: No, no me adores a mí. Yo soy un siervo de Dios tal como tú y tus hermanos los profetas… Adora únicamente a Dios.”

El pasaje del salmo 91, entre otros, nos asegura de que Dios designa ángeles para proteger y guiar a sus fieles. No debemos adorarlos porque ellos son seres que nos ayudan a cumplir la voluntad de Dios y son efectivos en la protección y en la guerra espiritual.

Ahora bien, tenemos una contraparte, los ángeles caídos. Estos son los que siguieron a Lucifer en su rebelión contra Dios. ¿Por qué? Porque los ángeles tienen voluntad propia. Efesios 6:12 nos dice: “Porque no tenemos lucha contra carne y sangre, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este mundo, contra las fuerzas espirituales de maldad en las regiones celestes.” Pero Pablo nos aconseja que nos pongamos la armadura de Dios para resistir el día malo y al maligno. Mientras que Jesús en Lucas 10:19 dijo: “Miren, les he dado autoridad contra todos los poderes del enemigo.”

Salmo 34:7 dice: "El ángel de Jehová acampa alrededor de los que le temen, y los defiende." Este versículo resalta la presencia constante de los ángeles en la vida de los creyentes, ayudándoles y brindándoles protección y defensa.

Salmo 91:14 “El Señor dice: Rescataré a los que me aman; protegeré a los que confían en mi nombre”. No estamos solos, nuestro Padre amado vela por el cuidado de sus hijos de su pueblo y de su iglesia.

Sin dudas, estas verdades bíblicas reflejan una verdad y una creencia indiscutible de que Dios cuida y ayuda a sus hijos a través de sus ángeles. “Porque a sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden en todos tus caminos”. Amén.


Yubisai Suniaga Rada

Suscribete y Comenta.


miércoles, 5 de noviembre de 2025

DIOS TIENE PLANES DE BIENESTAR Y NO DE CALAMIDAD

 


Jeremías 29:11 Porque yo conozco los planes que tengo para ustedes —afirma el Señor—, planes de bienestar y no de calamidad, a fin de darles un futuro y una esperanza.

Este versículo comienza diciendo “Yo conozco”, y está es una declaración firme del conocimiento absoluto de Dios. Y, ¿qué conoce?: "Los planes que tengo para ustedes" dice. 

Esto nos recuerda la omnisciencia de Dios, su capacidad de saberlo todo, incluso los planes y el propósito que debe vivir cada persona. Y eso nos debe dar paz y una esperanza de vida en nuestro paso por la tierra. 

Pero, no solo nos dice que tiene planes con nuestras vidas, sino que nos da una buena noticia cuando nos afirma que son planes de bienestar: Y eso nos muestra su naturaleza en donde nos deja ver que él quiere el bien para cada uno de nosotros. La calamidad o el mal no son parte del corazón del Todopoderoso, el pacado trae lo malo, el enemigo trae la calamidad, pero Dios en su misericordia reparte planes de gozo y de bienestar. Dios como Padre, quiere lo mejor para sus hijos, su mayor deseo es que podamos vivir plenamente, que seamos prosperados y felices en todo lo que hagamos.

El versículo nos habla de un futuro, dejandonos claro que él esta en control del tiempo y nos habla de una esperanza y esta debe mantenerse anclada siempre en sus planes perfectos. El propósito de sus planes en nosotros es que estos den frutos para su gloria y así mismo nos aseguran un futuro lleno de paz y de bendiciones. Esto nos hace saber que, a pesar de las circunstancias que podamos estar viviendo, las pruebas o los tiempos de conflicto, nuestra fe y confianza debe estar en el conocimiento de que Dios ya tiene un futuro planeado para cada persona, que hay posibilidades y promesas que podemos disfrutar a pesar de esas pruebas. La esperanza demanda una espera, el estar expectantes, un futuro, un propósito, una oportunidad que nos va a brindar alegría y nos va a motivar para que nos levantemos y activemos sus planes para nosotras, que nos llevarán a tocar otras vidas.

Y lo mejor es que, el versículo concluye con la afirmación: "Afirma el Señor". Esto es como un sello que refuerza la autoridad y la fiabilidad de esta promesa. Lo que quiere decir, que si Dios lo dijo, Dios lo hará. Sería como decir: "Hecho está". Dios mismo nos asegura que sus planes son verdaderos y que se cumplirán para exaltar su nombre en la tierra de los vivientes.

Los planes de Dios son de bien y nunca fallan. Mantengámonos firmes en la fe del Hijo de Dios y pidámosle al Espíritu Santo que nos fortalezca, nos revele y nos recuerde cada día, que hay un plan en el corazón de Dios para mi y para mi familia, y que lo veré hecho realidad, en el nombre de Cristo Jesús. ¡Amén!


Yubisai Suniaga Rada

Suscribete y comenta.

jueves, 30 de octubre de 2025

CREO QUE RECIBO LO QUE PIDO EN ORACIÓN

 


Marcos 11:24 Por eso les digo: Crean que ya han recibido todo lo que estén pidiendo en oración y lo obtendrán.


Creer es la base de la fe. El versículo comienza diciéndonos y animándonos a "creer" en que ya hemos recibido respuesta. Creer en que ya está en nuestras manos, en que agarraremos lo que pedimos en oración porque Dios nos lo envió.
 La fe es el fundamento principal, y el resultado lo tomamos anticipadamente
porque tenemos una confianza total en que Dios responde a sus promesas.

¿Cuál es el vehículo? La oración. Con ella activamos nuestra comunicación espiritual con nuestro Padre Celestial. Creer que ya he recibido lo que pedí, implica una actitud de fe activa y efectiva, una fe que forma una realidad y que me permite ver lo invisible en lo visible. Dios nos da la promesa de que "obtendremos lo que pedimos". La fe, al creer que ya se ha recibido, abre el camino para que la petición se manifieste en la realidad de nuestras vidas.

La Biblia está llena de ejemplos y enseñanzas, de personas y de eventos que nos hablan de la importancia de la fe y de creerle a Dios. Hebreos 11 nos habla de los héroes de la fe. En los evangelios hombres y mujeres recibieron su milagro y la salvación por causa de la fe. En el libro de los Hechos, muchos creyeron y fueron salvos, ellos y su casa. Porque confiaron y creyeron en el poder y en las manifestaciones del Hijo de Dios.

Hebreos 11:6 dice: "Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que él existe, y que es galardonador de los que le buscan."

Jesús dijo en Mateo 17:20: "Porque de cierto os digo, que si tuviereis fe como un grano de mostaza, diréis a este monte: Pásate de aquí allá, y se pasará; y nada os será imposible." Para Dios nada es imposible, pero en este caso, para nosotros, nada nos será imposible.

Efesios 6:16 nos anima a tomar "el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno." La fe es un escudo para nuestras peticiones, que apaga los imposibles, las dudas y la incredulidad.

Romanos 12:3 nos recuerda que Dios ha dado a cada uno una medida de fe para que podamos conectarnos con su palabra sus promesas y con lo espiritual.

Nosotras tenemos que orar con fe, creyendo que nuestras peticiones llegan al trono de la gracia y vuelven a nuestra vida con una respuesta. Creerle a Dios y a su palabra es fundamental en la vida cristiana. Implica confiar en la fidelidad de nuestro Padre, en su carácter, en sus promesas y en el poder de su Espiritu. Debemos tener una actitud de oración y de comunión activa, que nos permita acercarnos a Él, recibir respuesta y sus bendiciones.

Y finalmente en Juan 11.40 Jesús dijo: ¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios? “Creer y ver” Intangible y tangible. Dios se revela a nuestras vidas y nos muestra su gloria, su esplendor su poder y su amor. 

Se nos revela a sí mismo y revela nuestra necesidad de Él. Él es nuestro proveedor. Cada día Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo nos da señales de su cuidado hacia nosotros que somos sus hijos, él no tiene que responder nuestras oraciones, sin embargo, como Padre lo hace y suple todas nuestras necesidades, espirituales, naturales, materiales. Por su gracia podemos ver su gloria y recibir respuesta oportuna de lo que hemos pedido en oración. No te desesperes, ten fe y cree, que la respuesta viene en camino.

Recuérdalo: “Si crees verás su gloria” “Si crees recibirás lo que has pedido en oración” "Tu fe mueve montañas".


Yubisai Suniaga Rada

Suscríbete y Comenta.


miércoles, 29 de octubre de 2025

DIOS TE LIBRARÁ DEL LAZO DEL CAZADOR Salmo 91

 


Salmo 91:3 "Porque él te librará del lazo del cazador, de la peste destructora".

Este, es uno de muchos versículos en el salmo 91 que nos habla y nos enseña sobre la protección divina que está disponible para aquellos que creen y confían en Dios. Nos asegura que, al buscar refugio en nuestro Poderoso Dios, seremos resguardadas de los peligros y de las adversidades que nos pueden acechar cada día, tanto en el ámbito espiritual como en el físico. 

Nos recuerda que “El Ángel de Jehová acampa alrededor de los que le temen y los defiende”. Jehová es, Esperanza mía y castillo mío”. Esto, es porque tenemos un enemigo que "Anda buscando a quien devorar", enemigo de los hijos de Dios. Pero debemos confiar en que el Eterno es nuestro protector y siempre nos cuidará de todo peligro y de todo mal.

Cada momento podemos ver las trampas del enemigo, enfermedades mortales, conflictos, oposición, pobreza, bloqueos, destrucción, división, muerte, los ataques sean físicos o espirituales están a la orden del día. Las versiones bíblicas varían y usan palabras como: "trampa" o "lazo", y "peste destructora" o "pestilencia mortal".

El "Lazo del cazador": me hace pensar en trampas y peligros ocultos que nos pueden acechar y atrapar. Así como planes malvados del enemigo para desestabilizarnos de nuestra relación con el Señor. Es caer en las artimañas del enemigo para hacernos dudar de Dios y vivir atemorizados o lejos de él.

La "Peste destructora": Puede tener que ver con enfermedades graves, epidemias, pandemias, crisis. Situaciones difíciles que pueden amenazar nuestra estabilidad y nuestra fe. Pueden ser también enviaciones oscuras de hechicerías, maleficios, maldiciones, conjuros para matar y destruirnos.

Pero, tomemos en cuenta que lo primero que dice es que Dios te librará Esto implica que seremos protegidos, y en ciertos casos rescatados y liberados de esos lazos o trampas que el enemigo usará para sacarnos de la morada Santa del Señor. Dios puede librarnos de cualquier situación que nos ponga en peligro. Esta promesa nos llena de esperanza y confianza en el poder y en el amor de Dios. “Dios es nuestro refugio y nuestra fortaleza”

El Apóstol Pablo nos aconsejó en Efesios 6:11: "Pónganse toda la armadura de Dios para que puedan hacer frente a las artimañas del diablo". Los hijos de Dios tenemos que ponernos la armadura de Dios para contar con la protección divina que está nos proporciona y vivir activos en su palabra, que es la espada del espíritu.

Santiago 4:7 dice: "Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros". Tenemos que saber que cada uno debe someter su vida y su voluntad a la palabra y a los mandatos del Señor, apartarse del pecado y de la oscuridad, vivir en comunión con el Espiritu Santo le hará resistencia al enemigo y este huirá de nuestras vidas. Nosotras vivimos en un mundo sobrenatural, tenemos que poner en práctica nuestra fe y activar el discernimiento y el poder de la palabra, y con decisión firme, mantenernos resguardadas bajo la poderosa mano de Dios. El Espiritu Santo esta con nosotras y nos a dotado de poder y sabiduría espiritual para que podamos detectar y detener todos los dardos del enemigo.

Ten fe y confianza en el Señor Jesús. Dios nos librará de estas trampas, y nos protegerá de las influencias negativas del mundo. Él nos guiará por el camino seguro. Jesús puede sanarnos y llenarnos de fuerzas para superar todas las dificultades de la vida.

Mantente firme creyéndole a Dios, sabiendo que él te librará de todos los planes del enemigo y que toda peste, todo lazo y toda pestilencia es destruida en tu vida. Ningún agorero, ni hechicero podrá destruir tu casa ni tu familia. Los diseños del enemigo son derribados y la protección divina es activada, en el poderoso nombre de Cristo Jesús. ¡Amén!


Toca el enlace y sigue leyendo 

Salmo 91 Salmo de Poder

El que Habita al Abrigo del Altísimo


Yubisai Suniaga Rada

Suscríbete y Comenta.


jueves, 23 de octubre de 2025

SALMO 91 SALMO DE PODER

  
1 El que habita al abrigo del Altísimo, morará bajo la sombra del Omnipotente.

2 Diré yo a Jehová: Esperanza mía, y castillo mío; Mi Dios, en quien confiaré.

3 Él te librará del lazo del cazador, de la peste destructora.

4 Con sus plumas te cubrirá, y debajo de sus alas estarás seguro; Escudo y adarga es su verdad.

5 No temerás el terror nocturno, ni saeta que vuele de día,

6 ni pestilencia que ande en oscuridad, ni mortandad que en medio del día destruya.

7 Caerán a tu lado mil, y diez mil a tu diestra; Mas a ti no llegará.

8 Ciertamente con tus ojos mirarás y verás la recompensa de los impíos.

9 Porque tú has puesto a Jehová, que es mi esperanza, al Altísimo por tu habitación,

10 no te sobrevendrá mal, ni plaga tocará tu morada.

11 Pues a sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden en todos tus caminos.

12 En las manos te llevarán, para que tu pie no tropiece en piedra.

13 Sobre el león y el áspid pisarás; hollarás al cachorro del león y al dragón.

14 Por cuanto en mí ha puesto su amor, yo también lo libraré; lo pondré en alto, por cuanto ha conocido mi nombre.

15 Me invocará, y yo le responderé; con él estaré yo en la angustia; lo libraré y le glorificaré.

16 Lo saciaré de larga vida, y le mostraré mi salvación.

(Versión Reina Valera)


El Salmo 91 es un salmo de poder. Creo que muchas de ustedes conocen a alguien que tenía una biblia en la sala abierta en el salmo 91. Pero este no es un salmo mágico, son verdades espirituales que actúan en la intimidad, autoridad y comunión de un individuo con Dios. Personalmente, pude experimentar una gran liberación por causa de este salmo.

También, es un himno de confianza y seguridad en nuestro Creador, especialmente en tiempos de peligro y adversidad. Es entender que si nos refugiamos en Dios estaremos protegidas de cualquier mal. Dios en Jesús es nuestra fortaleza donde podemos escondernos y estar a salvo. Promete protección contra plagas, trampas y ataques del enemigo.

En él se nos muestra la fidelidad de Dios y su compromiso de proteger a quienes lo aman y lo conocen. Dios promete librarlos, honrarlos, y darles una larga vida. Se cree que este salmo lo escribió Moisés y él da testimonio como Dios lo ha guardado y le ha sido fiel a sus promesas. Pero hoy, nosotras también podemos dar testimonio de como Dios nos a protegido de las artimañas de Satanás y de cómo su cuidado a través del Espiritu nos a dado las estrategias y aun con este salmo, nos a instruido para proclamarlo y destruir las obras del diablo en nuestras vidas.

Vivamos en la presencia de nuestro Dios, oremos con fe en Cristo Jesús y pidamos al Espiritu la sabiduría para creer que él nos hace fuertes, nos guarda y contesta nuestro clamor. Hay autoridad y poder en nuestra boca por causa del Señor. Defiéndete del mal y proclama victoria. ¡Gloria A Dios!


Toca el enlace y sigue leyendo sobre el salmo 91 

Yubisai Suniaga Rada
Suscríbete y Comenta



miércoles, 22 de octubre de 2025

SALMO 51 "PURIFÍCAME CON HISOPO Y SERÉ LIMPIO"

 


Salmos 51:7 “Purifícame con hisopo, y seré limpio; Lávame, y seré más blanco que la nieve”.

Según lo que nos relata la biblia, David escribió este salmo después de que el profeta Natán lo confrontó por su pecado con Betsabé y por la muerte de su esposo, Urías. Después del encuentro con el profeta, David se da cuenta de la gravedad de su pecado, y que no era oculto a los ojos de Dios y se sintió profundamente conmovido y arrepentido.

Con esta historia, el rey David nos deja una gran enseñanza de lo que significa el pecado y sus amargas consecuencias. Pero también nos enseña ha como ir delante de Dios y humillarnos ante él arrepentidas y en busca de su misericordia. 

Este salmo es poderoso y revelador, y todo el salmo nos guía a desnudar el corazón ante nuestro creador y clamar por su perdón y la restauración de nuestras vidas.

Lo primero que tenemos que hacer ante una caída, es arrepentirnos con profundidad, lloro, clamor y suplica, reconociendo la gravedad de nuestras acciones, sin defendernos, excusarnos o culpando a otros. Admitir en su presencia que le hemos ofendido y que hemos entristecido al Espíritu Santo. David no intenta justificarse ni minimizar su culpa, nosotras tampoco debemos hacerlo. Tenemos que quitarnos esa falsa idea de que, “yo soy buena”, la biblia dice que bueno solo es Dios. Hay que reconocer abiertamente nuestras maldades, iniquidades, transgresiones, así como la necesidad del perdón y de que seamos limpiadas. “Purifícame con hisopo y seré limpio”, “lávame”.

Dios es un Dios de restauración, él anhela restaurarnos, pero nosotras también debemos anhelar ser restauradas para mantener una comunión abierta con el Señor. Perdonadas, limpiadas y liberadas. En el pecado le damos parte al enemigo, por eso, es importante pedir liberación y renunciar a entes de maldad en nuestra vida. Y todo esto lo podemos lograr con humildad, reconociendo que somos frágiles y que sólo podemos depender de la Gracia de nuestro Señor. “Esconde tu rostro de mis pecados, Y borra todas mis maldades”.

  • 1.       Expresión de arrepentimiento.
  • 2.       Confesión de pecado.
  • 3.       Súplica por el perdón
  • 4.       Liberación
  • 5.       Restauración de nuestra relación con Dios.

Todo pecado es una ofensa contra Dios, y las primeras afectadas somos nosotras, así como también podemos afectar a otros, y con ello una gran fractura en nuestra relación con el Espíritu Santo. Tenemos que anhelar un corazón puro y recto. Este salmo es importante aun hoy para todos los creyentes. Dicho esto, pidámosle al Espíritu Santo que nos ayude espiritualmente a quedar más blancas que la nieve, y que seamos transformadas por el poder de Dios, Jesucristo pagó por todos los pecados de la humanidad, y clavó en la Cruz toda acta de decretos que nos era contraria, en él tenemos redención y por él podemos ser perdonadas. Ven a sus pies, pide perdón y no peques más. 

Y, si todavía Jesucristo no es tu Señor y Salvador dile así: "Señor Jesús, entra a mi vida, entra a mi corazón y perdona toda mi maldad y todos mis pecados, me entrego a ti. Inscribe mi nombre en el libro de la vida y guíame con tu Santo Espiritu".  ¡Amén!

Efesios 1:7: "En él (Jesús) tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas de su gracia".


Yubisai Suniaga Rada

Suscríbete y comenta



lunes, 20 de octubre de 2025

EL BIEN Y LA MISERICORDIA ME SEGUIRÁN

 


Salmo 23:6 Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida, Y en la casa de Jehová moraré por largos días.

Creo que, todos en algún momento hemos declarado esta oración: “el bien y la misericordia de Dios me persiguen todos los días de mi vida

Pero, ¿a que se refiere con "El bien y la Misericordia"? Por un lado, he escuchado que el “bien y la misericordia” son dos ángeles que te producen el bien y la misericordia de Dios. Y por otro lado, dicen que el bien se refiere a la bondad, la generosidad y las bendiciones que Dios te provee cada día. 

Es todo lo bueno que experimentamos en la vida, como la salud, la provisión, las relaciones, la alegría, la paz etc, y cómo estas se estacionan en tu vida. Y la Misericordia la entendemos como el amor incondicional, la compasión y el perdón de Dios. Es su gracia, su capacidad de perdonar nuestros errores y de darnos nuevas oportunidades mientras caminamos en él y con él.

"Me seguirán todos los días de mi vida": Esto significa que el bien y la misericordia de Dios nos acompañarán constantemente, cada hora, cada minuto, a donde vaya y en cada momento de nuestra existencia. No importa si estamos en pruebas o pasando circunstancias duras, la palabra dice que: "Para los que aman a Dios, todas las cosas nos ayudan a bien". Y todos los días se refiere a una presencia constante, no ocasional.

"En la casa de Jehová moraré por largos días": Casa de Jehová, su presencia en la tierra, en su iglesia, al lugar de adoración, la koinonía con nuestros hermanos, en nuestra vida y la vida eterna con Dios. También "casa de Jehová" puede referirse o simbolizar la vida en comunión con Él para siempre; somos nosotros habitando en él, en su Reino en la tierra. Y la palabra “ciertamente”, nos asegura que es una determinación que es puntual y verdadera.

David, nos habla de fe y así la declara dándonos testimonio de su confianza en Dios. El salmista reconoce que el bien y la misericordia de Dios son constantes en su vida, y que él anhela vivir en el amor, en la misericordia y en la presencia de Dios cada día y para siempre.

Jesús de Nazaret nos dijo que el Consolador, su Espíritu, estaría con nosotros todos los días y hasta el fin del mundo. Él nos ayudaría, enseñaría y nos revelaría toda su verdad; para mí, esto es parte del bien y la misericordia de nuestro Padre Celestial. Es parte de su amor, fidelidad y su bondad. Por ello, así como David lo proclama, yo lo proclamaré, creyendo en fe que su bien me sigue y en gratitud me regocijaré y lo exaltaré por sus bondades, en su casa y con todos mis hermanos en Cristo Jesús. 

Dios es bueno, por eso hoy estoy más segura que en cualquier época de mi vida, y después de tantos procesos y pruebas, que el bien y la misericordia de Dios me han seguido y me han alcanzado. Así mismo, te animo a que tengas fe y a que lo creas con todo tu corazón y lo declares como el salmista David, porque tu Padre es bueno y te ama con amor eterno, sus misericordias para ti han sido nuevas cada mañana y su bien te ha sustentado cada día. ¡Gloria a Dios!


Puedes continuar leyendo la Serie del Salmo 23 en estos enlaces: 

Unges mi Cabeza con Aceite 

Aderezas Mesa delante de Mi

Jehová es mi Pastor

Confortará mi Alma

Tu Vara y tu Cayado me Infunden Aliento

Aunque Ande en Valle de Sombra y de Muerte


Yubisai Suniaga Rada

Suscríbete y comenta.


lunes, 13 de octubre de 2025

EL ÁNGEL DE JEHOVÁ ACAMPA ALREDEDOR DE LOS QUE LE TEMEN

 


Salmo 34:7: "El ángel de Jehová acampa alrededor de los que le temen, y los defiende".

Este Salmo, fue escrito por David cuando fingió estar loco ante el rey Abimelec y este lo corrió y pudo escapar de él. El salmo muestra su gratitud personal hacia Dios y por eso expresa: “El ángel de Jehová acampa alrededor de los que le temen”. Hay gozo por la protección divina para todos los que confían en el Señor.

El ángel de Jehová es enviado por Dios, para que establezca un campamento alrededor de los creyentes, y haga una barrera protectora contra el peligro y contra nuestros enemigos. David hace referencia que esto es para los que temen a Dios. El "Temor a Jehová", no es miedo en el sentido literal, sino una profunda reverencia, respeto y reconocimiento de la grandeza y santidad de Dios. Implica vivir una vida que honra a Dios que nos hace huir y evitar el mal.

Alrededor" sugiere una protección que rodea a los creyentes como un ejército militar que los defiende de sus enemigos y los resguarda de cualquier daño. El salmo nos invita a confiar en el Señor y a saber que en él tenemos seguridad, y que, jamás estaremos solos. Saber que Dios nos protege nos brinda consuelo en momentos de dificultad y anima a los creyentes a confiar en la providencia divina y en el poder y en el amor de Dios.

Pablo dijo: “Si Dios es por nosotros ¿Quién contra nosotros?” Esta afirmación de fe nos transmite confianza y seguridad, haciéndonos saber que las obras del enemigo estarán frustradas y destinadas al fracaso ¿Por qué? Porque el Ángel de Jehová está a nuestro favor y él acampa alrededor de nosotros, es nuestro escudo y nos defiende de los malos.

Recuérdalo, en los momentos difíciles, en tiempos de pruebas, de enfermedad, de tribulación y por ataques de parte del enemigo. Jesús, nos prometió que el Espíritu Santo estaría con nosotros hasta el fin del mundo. Nos delegó autoridad y puso ángeles a nuestro favor. Nombre sobre todo Nombre. Su palabra y sus promesas nos brindan fe, seguridad y conocimiento para defendernos con la verdad de Dios. Si de algo tenemos que estar seguros es que, nada podrá separarnos del amor de Dios. Su poder es sobre todo y sobre todos. De él somos y en él confiamos. 


Yubisai Suniaga Rada


jueves, 9 de octubre de 2025

JEHOVÁ ES MI PASTOR

 


Salmo 23:1 “Jehová (YHWH) es mi pastor”.

Desde que tengo uso de memoria, siempre escuché que el nombre de Dios era “Jehová”, Dios único, creador de la humanidad, por quien inicio el mundo y la fe cristiana, ya que es Padre de Jesucristo el Salvador. No obstante, cuando llegamos a la fe, leemos las escrituras, escuchamos sermones y eso nos ayuda a aprender muchas cosas más del poderoso nombre de Dios, conociendo también que, tiene muchos otros nombres compuestos. 

Su nombre tiene un significado muy pero muy profundo. Hoy, con tanto conocimiento hay controversias del significado y de cuál es su verdadero nombre según el idioma original. Entonces, vamos a tratar, con sencillez, y en nuestro idioma, de entender un poco del nombre de nuestro Dios y del poder que posee.

También es importante saber porque le decimos “Dios”, y esta palabra se refiere a un “Ser Supremo” y tiene sus raíces en la palabra latina “deus”, que está conectada a un antiguo concepto indoeuropeo que significa "brillo" o "luz". En la biblia el nombre Elohim, se traduce como "Dios" y en él se refleja la majestad y el poder del Creador del universo. Cuando se habla del “Dios de Israel” marca Soberanía y es presentado como el único Dios verdadero.

El nombre Jehová es un nombre adaptado a nuestro idioma, proviene de las letras hebreas YHWH, sin vocales, que se consideran el tetragrámaton. Su significado se traduce comúnmente como "Él será", "Él es" y "Él fue", lo que refleja la eternidad y la inmutabilidad de Dios. Según las escrituras y el idioma hebreo, este es el nombre del Dios Creador de la humanidad, de todas las cosas y quien las sustenta. Ahora, YHWH (Jehová) La Biblia Reina Valera traduce este nombre comúnmente como "Yo soy el que soy" e igual representa la eternidad y la inmutabilidad de Dios, llenándolo todo. Al invocar y proclamar su nombre, los creyentes reconocen su soberanía, amor, paternidad y fidelidad. Isaías 42:8: "Yo soy Jehová. Ese es mi nombre; y a ningún otro daré yo mi propia gloria." Su nombre resalta su grandeza, así como su deseo de ser reconocido y adorado.

Salmos 68:4: "Canten a Dios, canten salmos a su nombre; aclamen a quien cabalga sobre las nubes, y regocíjense en su presencia. ¡Su nombre es el Señor!" Aquí se nos invita a alabar y glorificar el nombre de Dios, reconociendo su grandeza y majestad.

Éxodo 20:7: "No tomarás el nombre de Jehová tu Dios en vano; porque Jehová no dará por inocente al que tome su nombre en vano." Este versículo enfatiza la reverencia que debemos tener hacia el nombre de Dios y la seriedad de su uso.

Hay poder en su nombre. Jehová es reconocido como el Dios Todopoderoso. Su poder se manifiesta en la creación del mundo, en los milagros realizados a través de los profetas, la palabra profética junto a su cumplimiento y en la redención de toda la humanidad. Este poder es una garantía de que él puede cumplir todas sus promesas y propósitos, mostrando que no hay nada imposible para Él. El nombre de Jehová también simboliza una relación íntima y personal con su pueblo. A lo largo de la Biblia, Jehová se presenta como un Dios que se preocupa por sus seguidores, por sus hijos, por eso los guía y los protege. Su cercanía invita a los creyentes a confiar en Él con todo su corazón y a buscar su dirección para vivir sus vidas.

Nombres compuestos de Dios: Sus nombres compuestos nos muestran su nombre con uno de sus muchos atributos. Veamos cinco de estos nombres.

Jehová-Jireh: Significado: "El Señor proveerá". Génesis 22:14, cuando Dios le provee un carnero a Abraham como sacrificio en lugar de Isaac. Hoy también nos provee.

Jehová-Rapha: Significado: "El Señor que sana". Éxodo 15:26, donde Dios promete sanación a su pueblo. Hoy también nos sana.

Jehová-Nissi: Significado: "El Señor es mi estandarte". Éxodo 17:15, después de la victoria de Israel sobre Amalec. Hoy nos da el triunfó y levantamos bandera.

Jehová-Shalom: Significado: "El Señor es paz". Jueces 6:24, cuando Gedeón construye un altar al Señor después de recibir una promesa de paz. Hoy también nos da la paz que sobrepasa todo entendimiento.

Jehová-Sabaoth: Significado: "El Señor de los ejércitos". Este nombre enfatiza el poder de Dios como líder de los ejércitos celestiales y se utiliza en varios pasajes, como por ejemplo en 1 Samuel 1:3. Hoy Dios pelea por ti y por mí y destruye toda obra de nuestros enemigos.

Sus nombres compuestos reflejan diferentes aspectos del carácter y de la naturaleza de Dios, mostrando que él se manifiesta a su pueblo según su necesidad, dándole provisión, sanación, protección, paz y mostrando su poder, su justicia y mucho más.

También vemos que el uso del nombre de Jehová en la adoración y la oración es un acto de fe que fortalece la relación entre Dios y sus seguidores, recordándoles su fidelidad, sus promesas y amor. Estos puntos destacan la importancia del nombre de Jehová en la vida espiritual de los creyentes, así como su eterno poder y propósito en el mundo y fuera de él.

Esto es solo un poco de lo que es nuestro Dios, Omnisciente, Omnipresente y Omnipotente. En sus manos estamos y de él somos. En este tiempo aprendemos de él por medio de las escrituras y por la revelación del Espiritu Santo, quien nos muestra su poder deidad y misericordia. Jesús de Nazaret es su imagen visible y por medio de quien él hizo la muestra de amor más grande para la humanidad. Juan 3.16 dice. “porque de tal manera amó Dios al mundo que ha dado a su hijo unigénito para que todo el que cree en él no se pierda más tenga vida eterna.

“Más a todos los que creyeron en su nombre (Jesús) les dio potestad de ser hechos HIJOS de Dios”

Este es tan solo una pequeña reseña de lo que significa el nombre de nuestro Dios. Nuestro Abba Padre. Ese fue el que David dijo en el Salmo 23:1 “Jehová es mi pastor” Solo quiero que entendamos quien es ese que nos pastorea y nos cuida. Dios Eterno, Dios de amor Dios de pactos. Y es por medio del poder de su amor, de su bondad, de su provisión, de su fidelidad y por el poder de su nombre y misericordia que le amamos, le servimos y en él estamos. ¡Gloria a Dios!


Puedes continuar leyendo la Serie del Salmo 23 en estos enlaces: 

Unges mi Cabeza con Aceite 

Aderezas Mesa delante de Mi

El Bien y la Misericordia me Seguirán

Confortará mi Alma

Tu Vara y tu Cayado me Infunden Aliento

Aunque Ande en Valle de Sombra y de Muerte


Yubisai Suniaga Rada

Suscríbete y comenta.


lunes, 29 de septiembre de 2025

UNGES MI CABEZA CON ACEITE


Salmos 23:5 “Unges mi cabeza con aceite…”

Estoy segura de qué, muchas de ustedes han experimentado o han escuchado sobre ungir la cabeza. En la biblia, este acto fue meticulosamente ordenado por Dios a Moisés, para que ungiera a Aarón y a sus hijos para apartarlos para su servicio. Es entonces Aarón, la primera persona a quien se le unge la cabeza, ya que, él fue escogido como el primer sumo sacerdote del pueblo de Israel. 

Esta historia está en Éxodo 29:7. La unción con aceite tenía un profundo significado, ya que, con ella, eras consagrado, apartado, dedicado para el servicio a Dios. Ella también simboliza la presencia del Espíritu Santo en el creyente y la autoridad delegada por Dios para un oficio.

David dice: “unges mi cabeza” La cabeza en la biblia representa la identidad, el ser completo, la dignidad, el centro de mando de una persona. Este acto era una práctica común en el pueblo de Dios. Con ella también se marca el honor, la hospitalidad y el cuidado. Así como, representa la bendición y el favor de Dios sobre la vida del que es ungido. Destaca el ser escogido sobre todos para una misión, así lo muestran las escrituras cuando los profetas ungían a los sacerdotes y a los reyes.

El aceite era preparado de una forma específica. Dios instruyó a Moisés en Éxodo 30 para crear el aceite de la santa unción con ingredientes específicos y proporciones exactas, para obtener un “aceite sagrado” para ungir también lo material, como el Tabernáculo, el arca, y todos los utensilios del templo. El aceite, como ya mencioné, es símbolo de la presencia del Espíritu, y representa la santidad, la sanidad, la prosperidad y la alegría. Ungir la cabeza con aceite es una señal de unción divina, protección y respaldo sobre una persona.

David amaba a Dios y él en el Salmo 23 nos habla de la cercanía y el cuidado que nosotros podemos tener con Dios y la de Dios con nosotros. En el Nuevo Pacto por causa de Jesús, vemos la unción de una forma más espiritual, somos honrados por él, bendecidos y proveídos en todas las cosas. El Espíritu Santo nos sella, nos unge, nos bautiza y nos aparta para buenas obras. El libro de Santiago dice que, podemos ungir a los enfermos y estos serán sanados. Jesús, el Mesías, es el ungido de Dios. Y Juan nos dice que nosotros tenemos la “Unción del Santo”, hemos sido consagrados y completamente apartados para nuestro Dios. Somos sus hijos amados. Él a ungido nuestra cabeza con su aceite santo. Suyo somos. ¡Amén!


Sigue leyendo la Serie del Salmo 23 en estos enlaces:

 Jehová es mi Pastor

Aderezas Mesa delante de Mi

El Bien y la Misericordia me Seguirán

Confortará mi Alma

Tu Vara y tu Cayado me Infunden Aliento

Aunque Ande en Valle de Sombra y de Mu


Yubisai Suniaga Rada

Suscríbete y Comenta.



miércoles, 24 de septiembre de 2025

ADEREZAS MESA DELANTE DE Mí

 


Salmo 23:5 "Aderezas mesa delante de mí en presencia de mis angustiadores…"

No sé, como te imaginas una escena así, quizás veas a Dios arreglando una mesa esplendida con todo lo mejor para ti, y tus enemigos físicos y espirituales enfrente de ella mirando, llenos de odio, y crujiendo los dientes. Vamos a tratar de ver en su contexto como puede ser esa escena.

La palabra: “Aderezas” en hebreo, implica un significado mucho más profundo que simplemente poner comida en una mesa, sugiere también que se pone todo en orden, bien arreglado y embellecido. Es una mesa real, un banquete abundante con todos los adornos y utensilios necesarios para un rey.

Esto nos dejar ver que, Dios prepara un banquete o una mesa de provisión para cada uno de sus hijos, haciéndole una honra pública, porque según el versículo, esto no sucede en lo secreto, sino frente, a la vista de tus enemigos o de aquellos que te persiguen. Los que te inventan falsos testimonios, te calumnian, te angustian, te atormentan, ellos estarán presentes observando la honra que Dios te va a hacer.

Pero, aquí también podemos ver la protección Divina, la protección que Dios ofrece a sus hijos. Incluso cuando estamos enfrentando desafíos, adversidades, enfermedades, tragedias. Dios nos asegura que él nos provee un lugar seguro y nos está cuidando. Esto nos certifica que no estamos solos en ninguna de nuestras luchas, él no nos abandonará, no nos dejará, su amor y paternidad nos provee protección ante las pruebas y ante la oscuridad.

La “mesa” es un lugar de provisión, alimento, reunión. Está simboliza la comunión, el pacto, la hospitalidad de Dios. Es un lugar sagrado de conexión con lo divino, donde se recibe y se comparte la bendición que el eterno nos a dado. Es provisión y saciedad, no solo en lo natural sino también en lo espiritual. Es palabra, fe, el pan y el vino, poder, las "Buenas Nuevas". Es Cristo a la mesa, son las Bodas del Cordero. Entonces “Aderezar mesa" implica una especie de celebración y un acto de victoria amenizado por Dios. Por medio de Jesús podemos experimentar la paz y la abundancia, incluso en presencia de aquellos que intentan hacernos caer, hacernos mal o daño. Estas palabras de David nos dan seguridad y nos afirman a saber que el mal, ni satán, ni los hombres, ni las circunstancias, ni los errores, tienen la última palabra de nuestras vidas.

Los "angustiadores" son personas u otras entidades que traen opresión, dolor, calamidad, aflicción y ansiedad a la vida del creyente, buscando siempre desviarla del camino y de la verdad de Dios. Por eso, cada día debemos buscar más y más de la presencia de nuestro Padre. El hecho de que Dios prepare la mesa "delante de mí" me muestra su cercanía y su constante presencia en mi vida. Solo en él encontramos consuelo, fortaleza y dirección, sin importar lo que suceda, somos parte de su cuerpo y de su grey. Su protección divina estará sobre mí y ahuyentará a quienes quieren hacerme daño. 

Así que, esta escena, nos apunta a que hemos vencido a nuestros enemigos, pero también debemos reafirmarnos, porque esto provocará a nuestros angustiadores y buscarán la forma de hacernos caer. Por eso debemos permanecer siempre en su presencia. Pero, no solo es eso, al preparar la mesa en presencia de nuestros angustiadores, Dios también muestra su poder, autoridad y su respaldo sobre nuestras vidas, propósito y sobre nuestro linaje. Esta es una forma de demostrarle al enemigo y a los que nos persiguen que, Él está en control y que nada puede separarnos de su amor y cuidado. Es una declaración audaz de fe y confianza que nos hace el cielo. Nosotras debemos ser humildes y rendirnos ante el cuidado de nuestro Padre.

Por ende, podemos corroborar, que habrá abundancia y tendremos la bendición de Dios en nuestra mesa. Todo esto es un símbolo de abundancia y bendición para sus hijos. Dios nos ofrece más de lo que necesitamos, abundantemente e incluso en los momentos más difíciles. Él proveerá. Y nos invita por medio de Cristo Jesús a disfrutar de su provisión y a experimentar la alegría y la paz que solo él nos puede dar. El Espíritu Santo nos hará disfrutar y vivir las grandezas de nuestro Padre Eterno. 

Recibe hoy la mesa real. Siéntate porque el banquete está servido. Tu Dios ha preparado para ti y para los tuyos un gran agasajo y Jesús está a la mesa. "Nada nos podrá separar de su amor" ¡Aleluya!

Salmo 23:5 (DHH) dice: "Me has preparado un banquete ante los ojos de mis enemigos…”


Sigue leyendo la Serie del Salmo 23 en estos enlaces:

 Jehová es mi Pastor

El Bien y la Misericordia me Seguirán

Confortará mi Alma

Tu Vara y tu Cayado me Infunden Aliento

Aunque Ande en Valle de Sombra y de Mu

Jehová es mi Pastor y Nada me Faltará


 Yubisai Suniaga Rada

Suscríbete y Comenta.

martes, 23 de septiembre de 2025

EL BIEN Y LA MISERICORDIA ME SEGUIRÁN

 


Salmo 23:6 "Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida; y en la casa de Jehová moraré por largos días."

El versículo comienza diciendo: "Ciertamente" esta palabra enfatiza una verdad o una promesa, indicando que algo es seguro, indudable, o de absoluta certeza. Podemos ver una hermosa y poderosa afirmación, de lo que es la presencia constante del bien y de la misericordia de nuestro Dios en nuestras vidas. Por eso tenemos que proclamar la palabra de Dios con fe, creyendo que es una verdad irrefutable y verdadera para los hijos de Dios.

David nos habla de lo que es la Presencia Constante de la misericordia y el bien de Dios, no se trata de tenerla en momentos pasajeros; el bien y la misericordia nos acompañarán todos los días y en todo tiempo. Esto nos recuerda que, sin importar las circunstancias, los problemas, la persecución, la escases o las pruebas, siempre podemos contar con Su presencia, su amor y su bondad.

Así podemos ver que la misericordia de Dios nos ofrece la oportunidad cada día de ser restaurados y perdonados. No importa cuántas veces fallamos, su misericordia no nos abandona, sino que nos da la esperanza y la fuerza para que tengamos un nuevo comienzo y la posibilidad de siempre levantarnos y seguir creciendo en él, para poder llegar a la estatura del varón perfecto que es Cristo Jesús.

El Espíritu Santo nos guía en la vida, su voluntad es buena, agradable y perfecta para mí, por eso Dios nos guía en nuestras decisiones y acciones, para que cada instante de nuestras vidas veamos su amor llevándonos de la mano y guiándonos por el buen camino.

En la casa de Jehová moraré por largos días” Eso es lo que Dios quiere, que permanezcamos en su casa, en donde nos reuniremos con nuestros hermanos y escuchemos sus promesas de Vida Eterna. Cuando buscamos y vivimos en la presencia de Dios, tenemos una perspectiva más amplia sobre nuestras vidas y lo que somos y esto nos motiva a vivir llenas de fe y gratitud. Tendremos seguridad y confianza en el Señor, tanto en esta vida como en la eternidad. En su casa podemos disfrutar de su bien, protección y bondad.

Para nosotras las que ya hemos creído en Cristo, esta promesa nos anima y nos revela como la misericordia de nuestro Padre eterno, no solo nos proveerá un hogar eterno en el cielo, sino que nos promete bendiciones y cuidados terrenales, y su sabiduría que nos permitirá conocer más de su palabra. Implica vivir cada día con una buena actitud, y con un corazón que busca y permanece firme en la presencia del Señor, reflejando siempre una vida de adoración y dependencia.

Por eso, hoy creo con todo mi corazón que, “El bien y la misericordia de Dios me seguirán cada día”. Prepárate, porque a donde quiera que vayas, su bien, su propósito, sus bendiciones, su amor, su protección, te seguirán y te alcanzarán. En el nombre poderoso de Cristo Jesús. ¡Amén!


Sigue leyendo la Serie del Salmo 23 en los siguientes enlaces:

Jehová es mi Pastor y Nada me Faltará

Unges mi Cabeza con Aceite 

Aderezas Mesa delante de Mi

Jehová es mi Pastor

Confortará mi Alma

Tu Vara y tu Cayado me Infunden Aliento

Aunque Ande en Valle de Sombra y de Muerte


Yubisai Suniaga Rada

Suscríbete y Comenta



lunes, 22 de septiembre de 2025

PADRE PERDONALOS PORQUE NO SABEN LO QUE HACEN


 Lucas 23:24 “Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen".

Esta frase, la dice Jesús en el momento en que estaba siendo crucificado, ¿Y para quién era?  Para sus verdugos. Jesús se dirige a su Padre, para hacer una intercesión, una petición de perdón por los soldados romanos y por todos aquellos quienes le estaban acusando injustamente, causándole un gran dolor y sufrimiento, hasta la muerte.

Pero ¿Cuál era la causa de la petición? Eran llevados por la ignorancia. La razón que ofrece Jesús para este perdón es que, aquellos que lo estaban crucificando: "no saben lo que hacen", reflejando su inconsciencia, su cero conocimiento del mal que estaban cometiendo y su total ignorancia de este hecho. Entendiendo también que, en Juan 10: 18 Jesús dijo: "Nadie me quita la vida, sino que yo la doy por mi propia voluntad…” Esto era un plan de Dios, pero aun así le dolió.

Hoy, el mundo está conmocionado por el asesinato del Activista conservador “Charlie Kirk” un hombre de paz, que solo confrontaba al mundo con la verdad y la hechura original de cada cosa y con la verdad de Dios en las Escrituras, ya que, era un hombre de fe, creyente de Cristo Jesús.

Pero, la enseñanza más grande después de esta tragedia que enfrenta una familia es escuchar a su esposa: “Erika Kirk” llena de dolor y entre lágrimas, decir ante una multitud y ante el mundo, estás mismas palabras que dijo Jesús: Padre perdónalos porque no saben lo que hacen Y luego dijo: A este hombre, a este joven, lo perdono Waaooo… El mundo se quedó en “Shock”, se pusieron de pie, la ovacionaron y muchos lloraron con ella.  Estamos acostumbrados a no perdonar, sino a odiar y a tomar venganza. Esta mujer, esta esposa que se siente destrozada, es un ejemplo del perdón de Dios, el perdón que solo en Cristo y en la fe que profesamos podemos dar. (El Señor la fortalezca) Tengamos empatía y oremos los unos por los otros, porque la maldad cada vez será peor. 

Aun dentro de la iglesia, muchos creyentes se niegan a perdonar, pero el perdón, es un mensaje de amor y misericordia. Está frase representa un acto de misericordia sin límites, en donde se perdona a los que quizás para nosotros no merecen el perdón nuestro, ni el perdón de Dios, pero no se dejan llevar por los sentimientos y solo fortalecidos en el Espíritu de Dios, se trasladan a la verdad y a la decisión final de obedecer al Padre y entregar el perdón.

Este es el ejemplo más grande de bondad y comprensión hacia nuestro prójimo, cuando aún en ignorancia y guiados por el mal, actúan y hacen daño, pero el Señor con su ejemplo nos dice, tengan sabiduría espiritual, amen y perdonen, no pagando mal con mal, sino con bien, al mal.  

Dios hace un llamado al mundo y a su iglesia, que ya ha sido perdonada, al “perdón mutuo”. Al abrazar nuestra propia necesidad de perdón, esta oración invita a los seres humanos a perdonarnos unos a los otros, mutuamente, como un acto que trasciende la naturaleza, a las tinieblas, al tiempo y que abarca a toda la humanidad, para cumplir el mandato de Dios.

Es importante entender que, el perdón en muchas ocasiones no elimina las consecuencias de las malas acciones y no significa que uno deba permitirse ser dañado una y otra vez, pero si tenemos que entender que, a pesar del dolor y de lo que haya sucedido, debemos limpiar nuestro corazón con el perdón, para que no seamos llenos de rencor, odio, ira y del deseo de venganza, eso nos ayudará a no ser presa del enemigo y a mantener limpia nuestra alma, mente y espíritu delante del Señor.

El perdón de Dios es un acto de amor y misericordia mediante el cual Dios borra nuestros pecados y nos restaura a una relación con Él. Es la remisión de la culpa por nuestras acciones.

El punto más importante sobre el perdón de Dios es que es un regalo gratuito y él lo ofrece a todos. No se gana por buenas obras, sino que se recibe por fe en Jesucristo. A través de la fe, recibimos el perdón y la vida eterna.

Todos hemos tenido que perdonar a alguien, si le has entregado tu vida a Jesús de Nazaret y fuiste perdonada, fortalécete en el poder de su fuerza y perdona a quien te haya hecho daño, no le des lugar al diablo, y sigue adelante, que su Santo Espíritu te ayudará a superar el dolor o la ofensa y pronto darás testimonio de la obra que el Señor a través de su Espiritu y su palabra han hecho en tu vida.

Mateo 6:14-15 "Porque si perdonan a otros sus ofensas, también los perdonará a ustedes su Padre celestial. Pero si no perdonan a otros sus ofensas, tampoco su Padre perdonará sus ofensas".


Yubisai Suniaga Rada

Suscríbete y comenta

domingo, 21 de septiembre de 2025

CONFORTARÁ MI ALMA

 


Salmo 23:3: "Confortará mi alma; me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre."

"Confortará" significa brindar consuelo, alivio y fortaleza. Creo que todas nosotras en algún momento, hemos clamado a Dios y le hemos pedido que nos dé consuelo, que nos alivie el dolor que sentimos a causa de una aflicción, o que nos fortalezca en tiempos de prueba para no desmayar.

David, nos muestra en los salmos que, aunque él amaba a Dios, pasó por muchas pruebas, aflicciones y desiertos tales como: conflictos familiares, enfrentó el desprecio, luchó contra gigantes, tuvo misiones suicidas, golpes de estado, guerras civiles y batallas interminables con naciones enemigas. Tuvo que huir de hombres que querían matarlo. Perdió amigos e hijos. Fue traicionado y burlado por personas que él amaba, mintió, mató y pasó por momentos de tristeza y desasosiego etc. No obstante, nada lo apartó de su Señor. Dios dijo que David era un hombre “Conforme a su corazón” Su sensibilidad y amor hacia su Creador Todopoderoso, fue más grande que sus errores y sus conflictos internos. Veamos las declaraciones y canticos que el salmista le escribe a su Eterno Adonáis.

“Confortará mi alma”: El versículo comienza destacando la acción de "confortar" o restaurar el alma. Que sería: Animar, alentar, consolar a una persona afligida. Esto implica sanar heridas emocionales, aliviar el dolor y traer paz interior. La palabra original en hebreo implica un retorno a un estado original y mejor. Dios nos consuela mediante el Espíritu Santo y la comunicación a través de la oración, la Biblia, y usa cada una de las pruebas para darnos fortaleza y para que luego podamos consolar y ayudar a otros.

“Me guía por sendas de justicia”: Dios no solo restaura, sino que también guía a sus hijos. El salmista reconoce que Dios lo conduce por "sendas de justicia", es decir, el Espíritu de Dios nos hace andar por caminos correctos y rectos basados en su moral y su palabra, que nos llevan a una vida plena y con propósito en la tierra.

“Por amor de su nombre”: La motivación detrás de esta guía y consuelo es el amor de Dios y su deseo de ser fiel a su nombre, moral y carácter. Dios actúa por amor, no por obligación. Nosotros le respondemos porque reconocemos su grandeza.

David nos enseña en el Salmo 23:3 que, Dios no solo se preocupa por nuestras necesidades físicas, sino también por nuestro bienestar emocional y espiritual. Nos ofrece consuelo, guía y la promesa de una vida justa, todo basado en su amor incondicional. Nuestra alma puede ser restaurada por el Espíritu Santo, y solo él nos puede guiar a puerto seguro, haciendo que cada instante de nuestras vidas seamos perfeccionados en él y para él. Nuestro testimonio debe hablar del poder de nuestro Dios y así mismo con él, debemos glorificar y exaltar el nombre de nuestro Padre y Señor Jesucristo.

Si estás afligida, recuerda que, Jesucristo de Nazaret tiene el poder para sanar, liberar y confortar toda tu alma. ¡Aleluya!

Salmo 62:1 Solo en Dios halla descanso mi alma; de él viene mi salvación.


Puedes seguir leyendo la Serie del Salmo 23 en los siguientes Enlaces:

Unges mi Cabeza con Aceite 

Aderezas Mesa delante de Mi

Jehová es mi Pastor

Confortará mi Alma

Tu Vara y tu Cayado me Infunden Aliento

Aunque Ande en Valle de Sombra y de Muerte


Yubisai Suniaga Rada

Suscríbete y Comenta.